Obispos católicos condenan rechazo a vacunas y piden al pueblo inmunizarse

El presidente de la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED), Arzobispo Freddy Bretón Martínez, hizo un enérgico llamado a toda la feligresía católica y a la ciudadanía en general a vacunarse contra el coronavirus como medio preventivo eficiente para evitar la propagación de la pandemia.

De igual forma, los obispos de las diócesis de La Vega, Héctor Rafael Rodríguez; de Barahona, Andrés Romero Cárdenas, y de La Altagracia, Jesús Castro Marte, aprovecharon las celebraciones religiosas del Jueves de Corpus Cristi para exhortar a sus feligreses que acatan las medidas dispuestas por las autoridades para frenar los contagios y condenaron la difusión de informaciones falsas y la minimización de la pandemia.

No obstante, los obispos reconocen que los medios preventivos, tales como el aislamiento estricto, la higiene exhaustiva, la verificación continua de la propia salud y otras medidas similares, no suelen estar al alcance real de la mayor parte de la población. De allí el llamado a las personas  a vacunarse contra el Covid-19 y a las autoridades a procurar que la vacuna sea administrada en todos los sectores y ambientes, y prioritariamente a quienes poseen mayor riesgo de contraer la enfermedad.

Ante el aumento de los contagios por el covid-19 y el escenario de “confusión” que se ha creado en torno a la pandemia y las vacunas, monseñor Bretón Martínez, arzobispo metropolitano de Santiago, durante la homilía de Corpus Christi, dijo a los fieles que “todos deben acudir a ponerse la vacuna y dejarse de estar escuchando disparates”.

Cuestionó lo que llamó “teorías conspiradoras” contra la vacuna del convid-19 y reiteró su llamado para que toda la población respalde las jornadas de vacunación y acuda a los centros a inocularse. “Por amor a Dios y por amor al prójimo tenemos que vacunarnos”, dijo.

“Me he encontrado hasta con religiosos y personas consagradas hablando boberías en contra de las vacuna. Entonces, cuándo vamos a controlar esa pandemia”, se preguntó. Agregó que en situaciones como ésta es cuando debemos acatar las disposiciones prácticas de las autoridades y las sugerencias científicas de los médicos y especialistas. 

Mientras que el obispo Rodríguez, de La Vega, recordó que los cristianos no pueden celebrar a Cristo sin solidaridad y sin darle la mano a los demás, especialmente a los afectados por la pandemia, y que una forma de ayudarlos es vacunándose para evitar contagiarse y contagiar a otros.

“Hay que olvidarse de individualismos y caprichos personales, y ustedes saben que la vacuna es el medio más autorizado científicamente para protegernos y evitar que nos afecte la gravedad que produce este contagio”, expresó elobispo Rodríguez, Entienden que los católicos no deben contribuir en modo alguno a la desinformación ya que está en riesgo la vida de las personas, especialmente de las más vulnerables.

En tanto que el obispo  de La Altagracia, Jesús Castro Marte, además de condenar las descalificaciones y críticas contra la vacuna del coronavirus, recordó que quienes la rechazan deben contar con la verdadera posibilidad de implementar, tanto en el corto como en el mediano plazo, los medios preventivos eficientes para evitar el propio contagio y el contagio de los demás.

La infraestructura de salud a nivel nacional y los presupuestos destinados a combatir la pandemia están resultando insuficientes. La minimización de la contingencia, la falta de pruebas constantes para determinar el tamaño del contagio, diversas fuentes de desinformación sobre la eficiencia y la inmoralidad en la ingeniería genética de algunas vacunas circulan por diversas redes sociales.

“Todo este escenario siembra confusión y disminuye la confiabilidad en las ciencias biomédicas rigurosas”, observó monseñor Castro Marte.

En este contexto, los obispos recordaron la postura de la iglesia católica sobre la vacuna, su origen y producción, esclarecidas por  la Congregación para la Doctrina de la Fe y por la Pontificia Academia por la Vida, y además  las palabras del Papa Francisco  que no solo considera que “desde el punto de vista ético todo el mundo debe vacunarse” sino que también rechaza el «negacionismo suicida” de quienes se oponen a la vacunación para frenar el avance de la pandemia.

Entienden los obispos que Las controversias sobre vacunas, fármacos y medicamentos deben realizarse con base en los datos que arrojen los más estrictos protocolos de investigación internacionalmente reconocidos. “Meras opiniones, rumores o teorías conspiratorias solo pueden ser objeto del rechazo de una conciencia cristiana y responsablemente formada», recordó el Arzobispo Bretón.

Fuente: Listín Diario

Deja una respuesta

Categorias